miércoles, 1 de octubre de 2014

Las 11 paradas obligatorias

El pasado 8 de agosto, La Voz de Galicia publicaba una presentación sobre los 15 lugares de obligada visita por las distintas rutas a su paso por Galicia del Camino de Santiago, excluyendo Santiago de Compostela.

Aquí os paso mis once albergues favoritos (iban a ser diez, pero conté mal y tuve que editar el artículo), por la calidad de la acogida y los recuerdos que me traen más que por los servicios que ofrezcan, hasta la fecha:


  • Albergue As Seixas, en el Camino Primitivo, en un pueblo sin servicios algunos, la calidad de la hospitalera compensa cualquier deficiencia.
  • Refugio del Monasterio de Oseira, en el Camino Sanabrés, simplemente espectacular, como entrar en el Nombre de la Rosa.
  • Albergue de Ribadiso da Baixo, en el Camino Francés, probablemente la mejor ubicación para disfrute de los peregrinos.
  • Albergue Bar de O Logoso, en el Camino a Fisterra y Muxía, pequeño albergue del que guardo el recuerdo del mejor despertar.
  • Albergue En El Camino, en el Camino Francés, uno de esos albergues magníficamente preparados en el que los hospitaleros están por encima de las instalaciones.
  • Mesón Albergue El Puntido, en el Camino Francés, en el pueblo que nunca llega de la Meseta, Hontanas, calidez a raudales de los hospitaleros.
  • Albergue Nuestra Señora del Pilar, en el Camino Francés, una de mis paradas míticas del primer año, aunque recientemente he leído que está en venta.

¿Cuáles son los vuestros?

jueves, 18 de septiembre de 2014

Protegiendo la mochila

Recientemente se han sucedido las noticias de robos en albergues, móviles, carteras, cámaras e incluso ropa. Es un fenómeno que acompaña al peregrino ya desde los tiempos del Códice Calixtino y ante los que el peregrino debe estar siempre atento.

No está nunca de más preguntar al hospitalero, revisar foros del Camino, grupos de Facebook y demás fuentes de información por posibles hurtos previos o que se tenga conocimiento de la presencia en la zona de los sospechosos habituales.

En cualquier caso, cada uno de nosotros debemos ser los principales protectores de nuestras cosas de valor, y, en segundo lugar, velar por las de nuestros compañeros peregrinos. Estar un poco atentos a gente comportándose de manera extraña, buenos, digamos sospechosa, que todos nos comportamos de manera un poco extraña, tampoco viene mal.

A colación de todo esto, hoy me llegó una anuncio cuando menos curioso, se trata de una malla para asegurar el contenido de la mochila.


Según el anuncio (Malla Pacsafe) pesa 500 gramos incluyendo el candado, un poco elevado para lo que buscamos en nuestras mochilas, pero quizá haya alternativas más ligeras. Es válido para mochilas de entre 22 y 55 litros.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Día 21 A Laxe - Ponte Ulla

Un mal día lo tiene cualquiera y hoy me ha tocado a mí. Así que me ha tocado seguir el consejo que tantas veces he dado, y tras empezar la jornada de hoy y recorrer diez kilómetros, al llegar a Silleda he tenido que parar y descansar el resto del día.

Le debo al Santo 18 kilómetros, y espero recuperarme lo suficiente para poder llegar mañana a Santiago sin más contratiempos. 



miércoles, 3 de septiembre de 2014

Día 20 Oseira - A Laxe

Todavía era noche cerrada al salir del albergue. Es increíble lo que han acortado los días que al principio saliendo a las siete como hoy no era necesario encender el frontal para ver.

He de volver a la ruta "oficial" del Camino y para ello es necesario salir del valle en el que se encuentra el Monasterio. Se hace esto por un sendero casi montañero sobre grandes piedras y canales de agua con piedras sueltas. 


Prácticamente al salir del valle para iniciar el descenso a la N-525, inseparable compañera en el Sanabrés, como la N-120 lo es en el Francés, encontramos un monolito indicando que Santiago de Compostela empieza a estar cerca. 

Al llegar a Castro Dozón, la variante de Oseira se fusiona de nuevo con el recorrido programado y empiezo a ver de nuevo los tradicionales mojones con la baldosa con la vieira. Algunas guías se empeñan en poner de referencia estos mojones con el kilometraje que deberían llevar marcado cuando haces años que lo arrancaron. 


A este lado del valle, la niebla me rodea y durante la mayor parte del recorrido apenas puedo ver unas decenas de metros más adelante de dónde estoy pisando. Con la niebla viene una bajada de temperatura de unos diez grados.


El cuerpo empieza a estar agotado y protestar de todas las maneras posibles. El esfuerzo físico ha sido importante y el calor de los últimos días han dejado su marca y su aviso. La previsión para los próximos días parece que será benévola como hoy, por contra, tocará lidiar con mucho más asfalto.

martes, 2 de septiembre de 2014

Día 19 Orense - Oseira

La noche será recordada como el intento de un grupo de peregrinos por dormir dentro de un horno de asar pollos. La ola de calor en Orense hicieron que el dormitorio del albergue estuviera a 32º a las diez y media de la noche. 

Muchos pensaron que había que salir de allí cuanto antes y a las seis menos cuarto se empezó a oír el ruido de mochilas y bolsas. Ante la posibilidad de dormir más, veinte minutos después me uní al coro orensano de madrugadores mochileando. 


Tras cruzar el Miño (y desayunar con los alemanes que sospecho que hoy se han quedado atrás) el recorrido inicia una constante ascensión para salir del valle del río, que, avanzada ya la madrugada permitía tener una magnífica panorámica de la ciudad. 


Poco a poco me fui encontrando con la disputa entre dos pueblos para llevarse el Camino por su lado. Opté por ir al Monasterio de Santa María de Oseira, y no me arrepiento. El lugar es espectacular, casi daba la sensación de convertirse en Guillermo de Baskerville. 


Como he dicho antes, da gusto cuando hay hospitalero en el albergue (también lo había en Orense). La visita al Monasterio es espectacular, José, el guía, se ha molestado en enseñarme después la fantástica biblioteca que están reconstruyendo (el Monasterio fue una de las víctimas de la Desamortización de Mendizabal) y el proyecto que están llevando a cabo para crear una Biblia ilustrada y comentada en formato electrónico.


Sigo coincidiendo con los tres polacos y tiene toda la pinta de que llegaremos juntos a Santiago. 

lunes, 1 de septiembre de 2014

Día 18 Xunqueira de Ambía - Orense

Existe una regla de oro que pocas veces falla: La llegada a una ciudad significa que el recorrido atravesará un polígono industrial. Orense no faltó a su cita y el trayecto de hoy discurre por el polígono San Cibrao antes de Reboredo. 

Los núcleos urbanos con catedrales soportaron y promovieron durante muchos años la peregrinación, y no me cuesta imaginar que el shock del peregrino medieval tras semanas de sendas y caminos fuera muy diferente del actual ante el bullicio de vehículos y gente.


Todavía recuerdo la agobiante sensación de Segovia en pleno sábado subiendo desde el acueducto hasta la catedral. Hoy no ha sido para tanto, había menos gente, más coches y el aburrimiento de tener que parar y esperar en los semáforos. 


Pero antes de todo eso tuve el gusto de andar por el arcén de una carretera secundaria mientras era testigo de que en esta zona, más que en cualquier otra de España, los intermitentes son un extra en los coches que nadie adquiere y que una señal con un número sobre fondo blanco rodeado de un círculo rojo significa velocidad mínima obligatoria.

Circular por el arcén en algunos tramos exige el dominio de una cuarta dimensión desconocida para el común de los peregrinos. 


Hoy tomé el mejor desayuno de toda la peregrinación justo a la salida de Xunqueira y la mejor comida a cincuenta metros del albergue de Orense. Menos mal que el consumo de calorías es alto, si llegaría a Santiago como un botijo. 

domingo, 31 de agosto de 2014

Día 17 Laza - Xunqueira de Ambía

De nuevo el recorrido me lleva a subir el monte Requeixada, no sin antes hacer una parada en casa de Paco, un gallego vuelto de Argentina que prepara unos desayunos espectaculares en Soutelo Verde. 

La subida es espectacular, a caballo entre dos valles. De me hizo más dura que la de A Canda, quizás por hacer más calor o por el fantástico concierto que la orquesta Savia Nueva celebró junto al albergue de Laza de una menos cuarto a cuatro y media de la mañana. 


Tras coronar Requeixada, nueva parada para conocer el bar de Luis Sande en Alberguería y firmar una de sus vieiras, que me ha confesado tras diez años recogiéndolas se está quedando sin sitio dónde ponerlas. 


Tras dejar a Luis, el camino se empina de nuevo levemente, y en ese tramo me he encontrado con una prueba de bicicleta de montaña que venía en dirección contraria, ellos bajando y yo subiendo, y he pasado un rato entretenido dándoles los tiempos de ventaja que les llevaba el que les precedía. 

Ellos al grito de "peregrino a la derecha" se han cuidado de evitar cualquier clase de accidente. No hay nada como sentirse identificado al grito de "PEREGRINO". Una falta leve a la organización de la prueba, que la ha señalizado para los ciclistas pero nosotros no teníamos aviso alguno. 


En ocasiones vuelvo la vista atrás y veo el camino recorrido, ese que según Machado no volveré a pisar. Quizá sea cierto, será otro polvo, arena, barro o asfalto. Habrá otras huellas. Me acompañará otra gente. Jamás volveré a pisar el mismo camino. 

sábado, 30 de agosto de 2014

Día 16 A Gudiña - Laza

El Camino recorre la Serra Seca por la provincia de Orense a una altura media cercana a los mil metros sobre el nivel del mar. 

Es una zona bastante abandonada pero llena ahora de movimiento por las obras del AVE que perforan sus montes preparando los túneles por los que circulará el tren. 


Los miembros de Protección Civil que ayer atendían el albergue nos indicaron que ignoráramos el aviso de ADIF a la salida del pueblo y siguiéramos la ruta original hacia Laza para no sumar ocho kilómetros en el desvío habilitado para evitar las obras. 


El que ha caminado sabe que ocho kilómetros suponen entre hora y media y dos horas de paseo, sumados a una etapa ya de por sí larga son una tortura sin paliativos. 

El Camino no atraviesa ninguna de las zonas de construcción, pero si circula por una carretera de montaña en la que se han tapado los límites de velocidad. ¿Se trata el desvío de evitar accidentes en dicha carretera o de que los camiones no tengan que reducir la velocidad?


La belleza de un pueblo semiabandonado en el que la naturaleza va ganando la batalla a las construcciones del hombre te hace reflexionar sobre lo difícil que es edificar algo imperecedero. Las casas de Portocamba seguramente estaban habitadas hace cincuenta años. 


Agradecer a la Asociación Ultreia por este pequeño pero completamente equipado punto de apoyo al peregrino en la aldea de As Eiras a unos seis kilómetros de Laza y cuando las fuerzas empezaban a flaquear. 

viernes, 29 de agosto de 2014

Día 15 Lubián - A Gudiña

Orense es la décimoquinta provincia de España por la que paso haciendo el Camino de Santiago. Entré esta mañana tras coronar el alto de A Canda. Se une a Navarra, La Rioja, Burgos, Palencia, León, Lugo, La Coruña, Asturias, Huesca, Pontevedra, Madrid, Segovia, Valladolid y Zamora. 


Y para demostrar que estoy en Galicia, el platito combinado que me han puesto hoy para comer en el bar O Peregrino, libre de colesterol del malo:


Esta ruta, al ser menos transitada ofrece la oportunidad de observar como la vida salvaje se cruza en tu camino. Llevo ya varios días en los que algún corzo (por el tamaño no creo que sean ciervos) salta del sendero asustado por el estruendo que seguramente voy causando. 

Esta mañana, el que me asustó saltando frente a mí desde el bosque fue el corzo. Me quedé estático y tuve la oportunidad de sacarle un par de borrosas fotos. 


La subida al puerto de A Canda me recordó a, corregidme si me equivoco, las cuestas que hay saliendo de Triacastela cuando se va por San Xil hasta la fuente de la vieira gigante. Un poco más largo claro está el puerto, pero sin tanto zigzag como el de ayer. 


Ayer nos juntamos en el albergue tres peregrinos polacos que vienen andando desde Sevilla (menos mal que no ha sido un mes de agosto especialmente caluroso) y un lituano que viene desde Granada (tela también). Las opciones de albergue hasta Orense son bastante limitadas, así que seguiremos coincidiendo los próximos días. 

Hace unos días que no pongo música así que recupero con algo de Lynyrd Skynyrd: http://youtu.be/qr3dWscslo8

jueves, 28 de agosto de 2014

Día 14 Puebla De Sanabria - Lubián

Preocupado por las distancias largas, la escasez de peregrinos, mi ampolla Amparo, la señalización confusa o la ausencia de señalización, la inexactitud de la guía y tantas otras cosas, había mucho ruido en mi cabeza como para intuir que hago por aquí.

Luego llega el Camino y te pone un mensaje en medio del sendero para que descubras lo que estás haciendo. 


Salí de Puebla de Sanabria con el convencimiento de no dar rodeos para evitar las obras del AVE. Si el Camino pasa por allí ninguna excavadora iba a obligarme a hacer kilómetros de más por la carretera. 


Actualmente (agosto 2014) hay tres tramos entre Puebla y Lubián "cortados" por las obras del AVE. Este corte queda reflejado por un cartel en varios idiomas y porque han tapado el mojón con la vieira y la flecha que señala el Camino. 

Afortunadamente sólo han tapado el primero y han dejado sin tapar las flechas pintadas, con lo que es imposible perderse. 


El primer tramo cortado, a la salida de Requejo, es el inicio de la subida hacia el Alto de Padornelo junto a un río y llega hasta la boca del túnel del AVE, el segundo es el camino de bajada a Aciberos y el último es la propia conexión entre Aciberos y Lubián. 

En todos los casos he pedido permiso para pasar que me han dado (he tenido suerte de no dar con el responsable de seguridad o de prevención de riesgos de la obra) y siempre con mil ojos para no ponerse en la trayectoria de alguna de las máquinas que allí trabajaban. 


El Alto de Padornelo se hace duro, pero no llega al nivel de exigencia de El Palo, O Cebreiro y La Fuenfría. Veremos mañana la subida A Canda como resulta. 

miércoles, 27 de agosto de 2014

Día 13 Mombuey - Puebla De Sanabria

El cuerpo humano es una máquina maravillosa. Se acuesta extenuado y al día siguiente está listo para calzarse las botas y continuar andando. 

Si a ese factor le unimos una mente llena de fuerza de voluntad y capacidad de aguante, nos encontramos ante el escenario ideal para abordar los rigores del camino. 


Sin embargo, un pequeño traspiés puede dar al traste con ese equilibrio, siendo la mente el eslabón débil de ese equipo. 

El mío de hoy ha sido triple, primero perdiendo un desvío que ha sumado un kilómetro a la ruta, luego las paralizadas obras del AVE que obligan a dar ridículos rodeos (si alguien me puede decir que línea de AVE es la de esta zona) y, finalmente, una guía con casi tres kilómetros de desviación sobre la distancia real.


Tocó calmar la frustración y centrarse en los pasos que estaba dando. Al poco, los pueblos, innumerables hoy, así como los distintos pasos de la autopista (en total, por arriba y por abajo creo que han sido cinco veces) iban quedando atrás y Puebla De Sanabria, destino final hoy se perfiló en el horizonte. 


Mañana y pasado toca salvar pasos de montaña importantes para llegar a Galicia. Espero que la guía no se desvíe mucho. 

martes, 26 de agosto de 2014

Día 12 Calzadilla De Tera - Mombuey

Las huellas de nuestras pisadas al recorrer el Camino tienen una esperanza de vida muy pequeña. Basta con el paso de otro peregrino por encima o un pequeño chaparrón para que desaparezcan. 


Las huellas que dejamos o nos dejan otras personas son mucho más duraderas. A veces basta con unos breves instantes para dejar una marca imborrable, positiva o negativa, en una persona. Esas marcas resuenan mucho en el Camino. 


Mientras me aproximaba hoy a la presa de Nuestra Señora de Agavanzal, una de las flechas que marcaba el camino en el que estaba indicaba "bicis". Me resultó muy raro pues las desviaciones para bicicletas suelen ser por carretera, pero al aproximarme pude ver que justo detrás marcando una pequeña senda apenas marcada había una flecha. 


Sin dudarlo me adentré en esa senda que en rápido descenso me llevó hasta el cauce del río, abriéndome paso entre los arbustos que pugnaban por reclamar ese terreno como propio. Quizá fueran diez o quince minutos de senda, pero, al igual que al cruzar el Tera días atrás, ha tenido un efecto revitalizador. 

Puebla de Sanabria está ya a tiro de piedra, y en un par de días (y algunos montes) más dejaré atrás la provincia de León para adentrarme en Orense, única provincia de Galicia que no conozco. Y es que no hay nada mejor que conocerlas a pie. 

lunes, 25 de agosto de 2014

Día 11 Tábara - Calzadilla de Tera

Tras despedirme de José y Joaquín, los únicos hospitaleros hasta la fecha, del albergue de Tábara, empecé a caminar con intención de llegar a Santa Marta de Tera, en una jornada corta para lo que viene siendo habitual. 


Pero llegué hasta allí, visité la escultura más antigua de Santiago Peregrino, vi que eran poco más de las doce, que el calor era tolerable y que tenía un albergue a tiro de piedra en Calzadilla De Tera (aunque en mi cabeza sea Calzadilla De La Cueza). 


Reposté el depósito de agua, la deshidratación es algo que no me puedo permitir, y me jugué el tipo en el primer tramo sorteando camiones que han destrozado el sendero para mover tierra de un sitio a otro, me imagino que vinculado a las obras del AVE en la zona. No me quejaría si luego se dedicase tiempo a deshacer el destrozo, pero quedará así. 

El calor apretaba de lo lindo, una subida de más de cinco grados, pero tuve la suerte de tomarme con una zona recreativa junto al río Tera con una salvadora fuente de agua potable y unos agradables mexicanos de Acapulco que se interesaron por mi Camino. 


Una hora más tarde llegaba a Calzadilla, pasé por la casa del alcalde para que me abrieran el albergue, ducha reparadora y paseo al pueblo de al lado para comer algo, el paseo ha merecido la pena. Si alguna vez os quedáis aquí preguntadme y os indicaré. 

Para terminar hoy, música de los American Authors http://youtu.be/Y66j_BUCBMY

domingo, 24 de agosto de 2014

Día 10 Granja De Moreruela - Tábara

Terminé de publicar mi texto (todavía no sé como llamarlos artículos, crónicas, reflexiones...) ayer y mientras leía un rato en la litera del albergue empezaron a llegar bicigrinos. 

Después de nueve días en los que había coincido en distintos días con dos bicigrinos y una peregrina, encontrarme con cuatro bicigrinos de una tacada casi hace que se me salten las lágrimas. Aprovechamos para compartir anécdotas, echarnos unas risas y cenar juntos. 

Es curioso como en el Camino Francés los solitarios suelen ser los bicigrinos, mientras que aquí son los peregrinos a pie los que pasan más tiempo a solas. 


Saliendo de Granja De Moreruela me adentro en un bosque que me trae recuerdos de casa, encina y jara, para desembocar en una de las mejores sendas que he recorrido en todas mis anteriores peregrinaciones, por la ribera del río Elsa. 


El recorrido pasa por Faramontanos De Tábara, donde me he podido tomar un fantástico café en el bar y, además, al salir del pueblo una señora me ofreciera indicaciones para llegar a Tábara y un café. La gente está siendo muy amable en todos los pueblos por los que he pasado, principalmente con el agua, vital en días con pocos pueblos intermedios. 


Llegué a Tábara avanzada la mañana, atravesé todo el pueblo hasta llegar al albergue para encontrarme con los primeros hospitaleros del Camino. Se trata de un albergue tradicional con cena y desayuno comunitario, limpio y bien equipado, es de donativo y además el hospitalero es quién publica esas fantásticas fotos con mensajes del Camino.

sábado, 23 de agosto de 2014

Día 9 Villalpando - Granja De Moreruela

Y por fin llegué al Camino Sanabrés o Mozárabe. Granja De Moreruela es donde se bifurca la Ruta de la Plata, hacia Astorga para unirse con el Francés o hacia Orense para llegar directamente a Santiago. 


Al poco de salir de Villalpando me he vuelto a encontrar con una compañera del primer día. Desde que saliera de Los Negrales cruzando por encima suyo, he estado caminando al Este de la A6, ahora vuelvo a su margen occidental para continuar la ruta. 


Los campos de cultivo han resultado infinitos en las últimas jornadas y hoy se ha empezado a atisbar en la lejanía algo de arbolado, pero no quiero anticipar nada, que también esperaba encontrar hoy otros peregrinos y sigo con el albergue convertido en mi casa de turismo rural. 


Lo dije el otro día un poco de pasada, y hoy quiero reiterarlo: Ser peregrino es ser un poco del Atlético de Madrid (y muy Cholista). 

El Camino tiene ese punto de sufrimiento, de agonía, de tener que poner todo lo que llevas dentro para llegar a Santiago, cambiamos el partido a partido por el kilómetro a kilómetro, el pensar en el próximo encuentro por el próximo pueblo. 

Para todos los que me leen, han hecho el Camino y son del Atleti, enhorabuena supercampeones.


viernes, 22 de agosto de 2014

Día 8 Medina De Ríoseco - Villalpando

Estaba saliendo de Cabreros Del Monte siguiendo la ruta que Google Maps me había trazado para hoy (imposible perderse) cuando me dió la sensación de estarme metiendo en un sembrado. 

De hecho, una máquina bajaba moviendo la tierra pegada al camino. Para evitar problemas decidí preguntar al conductor de la máquina, que al verme también me hacía señas de que parara. 

Al llegar a mi altura, paró la máquina, se quitó los cascos de música, abrió la puerta y con cara de incredulidad me dijo "¿Dónde vas y desde dónde vienes?". Está claro que si por la ruta de Madrid pasan pocos peregrinos, por esta variante menos. 


Tras aclarar sus dudas, me dijo que estaba arreglando el camino, que cada año machacan los tractores de la zona. Le di las gracias y continué sabiéndome el primero que reestrenaba esa senda. 

Al salir del albergue, mientras atravesaba Medina De Rioseco, caían algunas gotas de agua, que unos kilómetros más tarde y en un par de ocasiones me obligaron a colocarme el chubasquero. Eso, y un par de tramos largos por carretera han puesto la dureza a este tramo intermedio hasta Granja de Moreruela. 


Me tocó llegar a Villalpando a la carrera porque me cerraban el ayuntamiento y la posibilidad de conseguir las llaves del albergue. Aunque viendo el estado del mismo, casi habría sido una opción irme a un hostal.


Finalmente, un pequeño homenaje a Alberto Ibañez, peregrino que hace diez años siguió la misma ruta que yo, al que no tengo el gusto de conocer, pero cuyo blog me ayudó a planificar esta ruta y su enlace entre el Camino de Madrid y el Sanabrés http://aig01.blogia.com/2007/040505-duodecima-jornada-villalpando-granja-de-moreruela-12-6-2004-.php

jueves, 21 de agosto de 2014

Día 7 Ciguñuela - Medina De Rioseco

Termino con este tramo mi recorrido por el Camino De Madrid. Mañana partiré hacia lo desconocido en mi intento de continuar hacia Santiago por el Camino Sanabrés. 

Este desvío me obliga a hacer dos etapas sin señalizar, una hasta Villalpando, que es parte del Camino del Sureste, y otra hasta Granja de Moreruela, inicio de la bifurcación del Sanabrés de la Ruta de la Plata. 


El plato de hoy ha sido una nueva etapa larga por la meseta castellana. Afortunadamente la temperatura ha sido agradable, incluso fría las primeras horas, pese a terminar casi a las dos de la tarde de andar. 


La primera hora de ruta ha sido de noche. Algo tiene de aterrador la noche que te da por pensar en zombigrinos persiguiéndote y extrañas señales lumínicas que intentas convencerte de que se trata de las luces de guía del aeropuerto de Valladolid. Al final era un campo eólico. 


Tras esa primera hora, falló el café, más tarde falló el pincho y, ante las protestas de Amparo, he terminado con mis reservas de barritas de cereales y galletas, con lo que espero poder reponer hoy aquí. 

Y para acabar, un poco de música de Passenger para motivarme: http://youtu.be/G7tj1twcZ2I